El historial de la Cooperativa La
Patria Grande Ltda. puede dividirse en tres etapas: Nacimiento; Desarrollo y
Consolidación.
El Nacimiento
en 2008, luego de las múltiples experiencias de pequeños costureros familiares,
esta originado en la conclusión a la que se llegó después de haber probado las
limitaciones de un modelo de microemprendimientos que fracasaron por variadas
razones.
Los distintos niveles de saberes de sus
integrantes, la disparidad de las herramientas con las que contaban, la falta
de continuidad en el trabajo, la imposibilidad de hacer frente en tiempo y en
forma a trabajos que pudieran ser cuantiosos en la producción, la inexistencia
de capital para hacer frente a inversiones en materia prima, la falta de lugares
e instalaciones adecuadas para afrontar un trabajo continuo, la falta de
mecanismos de resolución de propuestas de trabajo, la falta de liderazgos para
la toma de decisiones, entre otros elementos, motivaron la búsqueda de
propuestas alternativas.
Muchas máquinas, muchas ilusiones y hasta
muchas amistades se perdieron en el intento de desarrollarse entrecasa y
obligaron a buscar otro rumbo.
Llegamos a la conclusión de que era
imprescindible unir los esfuerzos. Alquilamos un galpón, juntamos distintas
experiencias, distintas herramientas y nos propusimos construir una fábrica lo
más parecida a una fábrica tradicional, pero social.
Fue necesario entender que había que juntar
fuerzas y voluntad, pero que eso debía estar acompañado por el entendimiento de
que en esa fábrica no habría patrón, mientras que además, significaba adoptar
con convencimiento que a partir de ese momento debía haber horarios de trabajo,
comportamientos en equipo y estructura de trabajo con responsabilidades.
Las máquinas por primera vez homogéneas
brindadas por un subsidio del Ministerio
de Desarrollo Social de la Nación y la
capacitación en funcionamiento de fábrica del INTI, nos permitieron asumir nuestro primer trabajo importante que
fue la elaboración de los guardapolvos para los hijos de los afiliados del SUTEBA.
Fue
complejo asumir el espíritu cooperativo. La escasa experiencia laboral
de algunos y la memoria histórica de trabajo bajo patrón de los más grandes,
obligó a redoblar esfuerzos para asumir las responsabilidades propias y el
compromiso con el trabajo.
Como pasa siempre, fue el trabajo el que ordeno
las expectativas, los objetivos, los compromisos y los comportamientos. Un
convenio con el MDSN para ingresar en el programa de producción de guardapolvos
nos obligó a enfrentar nuevos y concretos desafíos.
Habíamos nacido, la experiencia daba sus
primeros resultados y habiendo consolidado el primer grupo de diecinueve
trabajadores debíamos ahora convertirnos en una verdadera cooperativa.
Es 2010 el año del Desarrollo. Comienza a necesitarse ordenar la producción y la
administración del funcionamiento. Habiendo nacido como cooperativa bajo las
normas establecidas por la
Resolución 3026 del INAES
nuestro origen tenía que ver con trabajadores desocupados con poca o
ninguna experiencia en funcionamiento productivo y menos administrativo. Por lo
tanto con cursos de capacitación solventados por el Ministerio de Desarrollo, pudimos avanzar en los controles
de calidad y administrativos que requerían los nuevos trabajos. Los primeros
asesoramientos permanentes legales y contables fortalecieron la propuesta y nos
avalaron para abordar dos nuevos pasos en el desarrollo.
Nuestro conocimiento de la ciudad de Mar del
Plata nos da la posibilidad de comenzar a trabajar con viejos compañeros de lucha
de los primeros años del 2000. Montamos la nueva fábrica en Av. Luro 7333 y
mientras la de la calle 28 de La
Plata se solidificaba, veinte nuevos/viejos compañeros
comienzan a repetir el esquema platense, ya con la experiencia de los aciertos
y errores anteriores.
Una nueva fábrica nacía con todas las
comodidades que aprendimos que eran necesarias para una buena labor diaria.
Simultáneamente y como consecuencia de un
ofrecimiento del MDSN y el INTI, montamos en calle 28 una mesa de corte de
telas planas, donde empezamos con las primeras armas en esta tarea. Nuevamente
supervisión, formación y control estatal nos hicieron avanzar con mucha
velocidad y seguridad en esta nueva tarea.
A mediados de 2010 comienzan experiencias de
diversificación de la producción. Nuevamente el MDSN nos invita a participar de
la confección de los equipos para los Juegos Evita, confeccionando remeras,
camperas, pantalones y calzas diseñadas, cortadas, bordadas y estampadas por la
cooperativa. Para ello incorporamos bordadora y un nuevo equipo de estampado.
La experiencia fue sumamente exitosa y nos animó a realizar los primeros
trabajos destinados al sector privado, para lo que en ese tiempo aún no
estábamos preparados. El que mucho abarca poco aprieta, así que lo privado no
lo seguimos desarrollando. Finalizamos 2010 con los tres equipos funcionando y
con un esquema de funcionamiento aceitado.
Es 2011 el año de la Consolidación. A principios de
año inauguramos en calle 66 en La
Plata una fábrica de 400 m2, con dos mesas de corte que tiene
una capacidad instalada para cortar 50.000 guardapolvos por mes, y realizamos
cortes para empresas privadas, y entre la fábrica de calle 28 de La Plota y la
de Mar del Plata la producción es de 10.000 guardapolvos mensuales con una
dotación actual de 70 trabajadores.
A mediados de año la compra de máquinas pesadas
nos permitió aproximarnos seriamente a la confección de ropa de trabajo tipo
Grafa, ambos hospitalarios, camisas y camperas, confecciones en las cuales
hacemos importantes experiencias. Así mismo y por una nueva invitación del
MDSN, incursionamos en un area inimaginada que es la fabricación de cortinas
tipo Roller para instalar en distintos edificios del ministerio. Incursionamos
en la fabricación de gorros, banderas, banderines y buzos para distintos
clientes.
Nombramos a las tres fábricas así: Bartolina Sisa en La Plata (confección y
terminado), Mariscal Solano López, La Plata (diseño, corte y
logística) y Manuel Dorrego, Mar del
Plata (confección, terminado y formación).
En el avance del año consolidamos un equipo de
legales y contable que nos permitiera ordenar contratos, proyectos, impositivos
y stock-producción. Hoy las fábricas trabajan nueve horas de lunes a jueves y
ocho los viernes, tuvimos 15 dias de vacaciones simultáneas y enfrentamos
nuevos desafíos, como serán la producción, ya en mayor escala de ropa de
trabajo tipo Grafa, profundizar en el diseño y el bordado, y abrir la venta de
nuestros productos a empresas y público en general.
Para todo esto, se inicia una etapa de mayor
profesionalización en los cuadros de conducción y gerenciamiento que nos
permitan planificar el crecimiento y las estrategias de abordaje en la
diversificación productiva.